Hacedores notables: David Steiner
El diseñador inglés David Steiner explora sus intereses sobre los procesos de producción y nos enseña lo que es posible hacer con un poco de ingenio en la comodidad de tu hogar. ¿Quién dijo que una lavadora solo servía para lavar ropa? ¿Alguien se ha preguntado qué se puede hacer con una túrmix aparte de un buen bizcocho? Vivimos rodeados de máquinas y sin embargo rara vez intentamos sacarlas de contexto, utilizarlas para fines distintos a los que se planteaban cuando fueron diseñadas o compradas.
Cada vez poseemos más electrodomésticos, y estos a su vez se vuelven más específicos; la especificidad y la compartimentalización acompañados de una oferta masiva, desde mi punto de vista, son herramientas muy potentes a favor de la cultura del consumo. Iniciativas como la de David nos sirven para reflexionar. Evidentemente, utilizar una cubertería fabricada en plomo y estaño no es lo mejor para la salud, pero demuestra un principio que cobra más sentido a medida que somos conscientes de que el mundo y sus recursos son finitos.
Por otro lado, este tipo de creatividad no es nada nuevo, el ingenio siempre ha estado fuertemente ligado a la necesidad. Solo hay que ver el ejemplo de Alfredo Moser, un mecánico brasileño a quien los cortes de suministro eléctrico le llevaron a buscar una solución innovadora para poder trabajar: convirtió una botella de agua en una «bombilla» de 50W. La historia está llena de ejemplos como el de Alfredo pero algo pasa cuando también desde el bienestar nos planteamos hacer este tipo de acciones, (mas allá de marcar un tanto publicitario como diseñador en busca del éxito) ¿Será que el mensaje esta calando? Quizá simplemente nos aburrimos. La verdad es que prefiero pensar que estamos comenzando a entender las cosas de otra forma y espero que todo esto sea el principio de una nueva forma de pensar y, sobre todo, de HACER.
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